El kárate infantil tiene como propósito lograr una defensa personal y un mejora física, mental y espiritual. Además, el kárate se fundamenta en los valores como filosofía de vida como el honor, el valor, la paciencia, la integridad, el autocontrol y la lealtad.

En cuanto a los beneficios de este arte marcial, pueden destacarse, tanto en el ámbito físico como psíquico, los siguientes:

  • Mejora la coordinación psicomotriz.
  • Desarrolla la destreza, los reflejos y la acción-reacción.
  • Descarga energía.
  • Enseña educación, disciplina y respeto a todo el mundo que nos rodea.
  • Favorece el aumento de la concentración.
  • Ayuda al niño a conocerse más y controlarse a sí mismo.
  • Enseña valores fundamentales como la tolerancia y la responsabilidad.
  • Genera la confianza de los niños en sí mismos.
  • Desarrolla la fuerza, el equilibrio, la velocidad y la flexibilidad.